Un 13 de septiembre del año 2006 fui trasladada para la Oficina de Atención al Ciudadano de la Gobernación del Estado Bolívar, donde Andrés y María eran los jefes, en ese momento llegué con mucho temor, tenía una serie de interrogantes en mi mente que luego el tiempo se encargó de darme las respuestas, me dedique a trabajar y a dar lo mejor de mis conocimientos profesionales, lo cual me sirvió para ganarme el respecto y amistad de Andrés, ser humano con una gran personalidad y calidad humana, el cual me brindó su apoyo incondicional, nunca olvidaré una tarde en la oficina mi jefe me informó que la persona que dio la orden de mi traslado a esa oficina quiso perjudicarme delante de la jefa mayor, y tú amigo mío me defendiste manifestando “esa muchacha es lo mejor que me ha llegado a la oficina, no para de trabajar, es más considero que es demasiado trabajo para ella sola” y a los pocos días me enviaste a una compañera para que me apoyara en la oficina, y más impactada quede, cuando me enteré que la persona que dio la orden de mi traslado te había encargado que me despidieras, pero tú actuando con mucha equidad y con mucha ética profesional, no cumpliste con ese encargo, por eso Andrés te doy mil gracias adonde quiera que estés y para mi siempre serás mi salvador laboral, y desde aquí mi esposo, mi hijo menor y yo le pedimos al Todopoderoso que te cobije en su seno y te cubra con su manto sagrado.
Tu querida amiga Aracelis Patete desde Ciudad Bolívar, Venezuela.
Asi te recordare, como un ganador amigo mio.
